Ojú...
aún dura el susto metido en el cuerpo de un partido vital para que nuestro
cadete masculino mantenga las opciones de meterse en la Final Four provincial
del Campeonato de Andalucía. Y mira que a lo largo del encuentro con el, antaño
inasequible, CB Náutico parecía que la superiodidad de Fresas era evidente. De hecho,
en ningún momento estuvimos abajo en el marcador.
Pero
lo cierto es que la sensación es que debíamos haber sufrido mucho menos y haber
obtenido una renta muy superior a los dos puntos alcanzados en la pista de la
ribera del río (y de la Feria). Nuestro equipo cuajó un buen partido, pero
pequeños grandes detalles como las canastas fáciles falladas tras buenas
jugadas, y –sobre todo- el nefasto porcentaje en tiros libres, casi dan al
traste con la buena faena realizada.
El
inicio de los verdinegros fue fulgurante, corrigiendo la frialdad de otros
comienzos anteriores, permitiendo que mandáramos con solvencia, con ventajas
superiores a los diez puntos, hasta alcanzar unos guarismos de 6-19 para
concluir el primer cuarto, con los puntos muy repartidos entre Yeico, Julio, Dani y Cuti, a los que se
sumaba un valiente Víctor Mesa.
Todo
parecía ir rodado hasta que las buenas individualidades de los locales
empezaron a producir, resultando determinante la salida del dorsal 12, un pivot
de dos metros y buenos fundamentos aunque poco juego ofensivo en la pintura. No
obstante, su envergadura hacía rectificar las entradas de nuestros aleros y
forzaba en exceso los tiros de los pivots, recortando levemente la desventajas
hasta nueve puntos al descanso (23-32).
Tras
el descanso se repitió la salida desbocada de los chicos de Mendigorría, que se
desataron forzando faltas que cargaban paulatinamente a los locales, y
manteniendo un buen acierto desde la línea de libres, para ampliar su ventaja
hasta los 17 puntos, pero ahí se acabó la gasolina y, poco a poco los náuticos
se reengancharon al partido aprovechando varias imprecisiones en la subida de
balón y un apagón considerable a la hora de atacar el aro contrario. Javi
Rodríguez cortaba el parcial con un tiro libre que permitía empatar el cuarto e
irnos al último período con la ventaja intacta de nueve puntos. Solo había que
jugar con cabeza y seguir demostrando la evidente superioridad presumida hasta
ese momento.
El
último cuarto fue una auténtica tortura. El pivot local hacía estragos con
siete puntos seguidos, triple incluido, pero los nuestros aguantaban, aunque
los fallos en bandejas fáciles hacían que a mediados de cuarto la ventaja se
hubiera quedado en seis. El carrusel de fallos en tiros libres por nuestros
chicos y un nuevo parcial de 7-2 para los locales dejaba el marcador con un
solo punto de ventaja a falta de dos minutos, ampliada a dos con el único tiro
libre de los quince lanzados en este cuarto que entró. Los nueve siguientes,
propiciados por las faltas que hicieron desfilar a tres jugadores de Náutico al
banquillo, además de dos técnicas al entrenador local, hicieron agua,
manteniendo la agonía, resuelta favorablemente por el buen trabajo defensivo de
los verdinegros con un marcador definitivo de 54-56.
Lo
mejor, una victoria vital para seguir optando a pelear por la Final Four, con
buen juego general, ensombrecido por el inesperado problema de esos tiros
libres que lo hubieran hecho todo mucho más fácil de haber entrado con un
porcentaje razonable.
Para
la estadística, los quince puntos y doce rebotes de Yeico, que retomó ese
protagonismo anotador esencial en este equipo, seguido de Dani con ocho tantos.
Julio y Cuti aportaron otros seis rebotes cada uno además de su media docena de
puntos.
José Carlos Cutiño
Delegado de Equipo
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