La última jornada de competición del año 2016 se saldó con
dos nuevas victorias en las competiciones que disputan nuestros cadetes
masculinos.
La primera se produjo –con menos fluidez de la esperada- en
el torneo municipal, frente al equipo de Albaida en el trianero polideportivo
El Paraguas. Fuera por exceso de confianza, fuera por no despertar a tiempo, el
partido resultó más duro de lo que cabía prever vistos lo resultados
anteriores.
El mal comienzo de los verdinegros, con una laxa defensa a
todo campo superada sin dificultad por el equipo que ejercía de local, adobado
con un escaso acierto atacante, provocó un rápido tiempo muerto que cambió la
dinámica aún sin marcar diferencias significativas. Por el contrario, el segundo
cuarto sirvió para romper el marcador y ganar el partido, con un parcial
determinante de 0-14 que llevaba el marcador del descanso a un 7-25 inapelable
en el que brilló especialmente la calidad anotadora de Javi Núñez y el trabajo
en la zona de Pepe.
La segunda mitad sirvió para repartir minutos pensando en el
partido federado de la sesión vespertina, lo que motivó un contraproducente exceso
de confianza que llevó a que el parcial de esta mitad se perdiera por cuatro
puntos. En cualquier caso, nunca peligró la victoria, con un tanteo final de
26-40, que debe servir para poner de manifiesto que no caben relajaciones en
este torneo, que tendrá en el próximo partido –ya en enero y contra los cadetes
de segundo año de Macasta- el punto de inflexión que defina el liderato del
grupo.
La mejor noticia, el debut con cadetes de Pablo Núñez,
infantil de primer año, cuyo desparpajo y calidad le llevó a brillar en el
discreto tono general.
La tarde fue para el último encuentro de la primera fase de
la competición federada, jugado en Lebrija, frente a un CD Tartessos muy
mejorado respecto a la primera vuelta. Aún así, el partido, sin demasiada
tensión ni trascendencia clasificatoria –las posiciones andaban ya definidas
desde la jornada anterior-, resultó entretenido, ya que los lebrijanos salieron
respondones, con los dorsales 9 y 10 muy metidos en faena.
Tardamos en igualar la intensidad de los contrarios, lo que
provocó que la diferencia al descanso fuera de solo 13 puntos (17-30),
sosteniéndose la anotación con la habitual de Pepe y Luis Pedroche, a los que
se sumaron en esta ocasión Javi Núñez y Pablo González. La segunda mitad
resultó mucho más fructífera, incrementándose la ventaja paulatinamente, con un
trabajo coral en el que más allá de la faceta anotadora hay que destacar la
producción y rendimiento –jugando para el equipo- de los mencionados Javi y
Pablo, el primero con ocho rebotes y tres tapones, y el segundo con seis
rebotes y cuatro robos, además de trece puntos con triple incluido. Al frente,
los quince puntos y once rebotes de Pepe y los catorce puntos, cinco rebotes,
dos tapones y dos robos de Luis Pedroche.
Nuestro jugador de selección infantil, Pablito Núñez puso el
broche con su primera canasta en una categoría federada que no le vino
grande... en absoluto.
El tanteo final de 31-69 respondía bien a la diferencia de
potencial, incluso dentro de esa relajación generalizada, y cierra una primera
fase en la que hay que congratularse del nivel competitivo mostrado en el grupo
más fuerte del torneo, poniendo en apuros –incluso ganando partido y basket
average al E.D. Betis Verde- a equipos de gran talento y físico.
En enero prometemos volver con nuevas emociones. ¡Felices Pascuas!!!
José Carlos Cutiño